viernes, 28 de octubre de 2011

#lesbianaverdadera


Esta mañana, al despertar, he comprobado que existía un hastag en Twitter que me ha despejado cualquier entontamiento matutino que suele dominarte cuando recién te despiertas. 

 ¿Qué? ¿Qué es lo que ha pasado en Twitter?





Este post está dirigido a aquellas que tengáis twitter y, como yo, hayáis visto el hastag que marcó tendencia ayer en España. Para aquellas que ni saben lo que es un hastag y no les interesa, no os vayáis tan pronto porque también os puede interesar. 
Y yo me pregunto ¿Qué le pasa a la gente por la cabeza? ¿Qué han desayunado, comido o cenado? ¿Qué está pasando en esta sociedad que lo cataloga todo? ¿Qué necesidad?





Resulta que el hastag que me tiene tan contenta y tranquila es: #lesbianaverdadera, ahí es nada. 


Yo, que intento imitar a los grandes para ver si se me pega algo, me he puesto a reflexionar sobre “lesbiana verdadera”, como otrora hizo Platón con el alma.


¿Qué pasa, que ahora me enteraré que hay un rotulador mágico, o una máquina como en las tiendas de Pull&Bear y, como a billetes, nos van a comprobar si somos verdaderas o falsas?
 No entiendo este tipo de cosas, ya bastante dificil es ser lesbiana como para andarte con estas tonterías de si eres falsa o verdadera (haber quien es la graciosa que le dice a sus padres: Papá, Mamá, que soy lesbiana, pero tranquilos, no estoy segura de ser una  #lesbianaverdadera)
Y voy más allá ¿por qué tiene que haber un test y estas tonterías de mirar si somos la #lesbianaverdadera o una imitación? Yo estoy cansada de las etiquetas y los estereotipos estos. ¡Señoras! Que me niego a ser como la camiseta que me he comprado en las rebajas: un % de algodón % de polyester...Me niego a tener que mirar la etiqueta para ver la calidad o de qué está hecha, esto no debería ser así. Pero tristemente lo es, creamos hastag y esperamos a ver qué dice la gente sobre la "lesbiana verdadera"; dejamos que otras digan quien es y quien no, cruzamos los dedos, y entonces sí, a ver si ha tocado el gordo y soy una #lesbianaverdadera o me conformo con lo que me quede de las definiciones... 


Más o menos dentro de poco será así la cosa:


Pelo cortado a lo chico + camiseta de cuadros+ 0 maquillaje+ amantes del fútbol o F1= 100% lesbiana
Pelo largo+ vestir alguna vez falda+ maquillaje (aunque sea para disimular ojeras)= 0% lesbiana


¡Vamos a ver, señoritas mías! 
¿No se lucha, ante todo, por ser uno mismo (y poder amar libremente a quien uno quiera) como para que en un hastag desterremos de un plumazo a las que se consideraban #lesbianaverdadera, sin entrar en estereotipos o lo que otros dicen que creen que debe ser una #lesbiana verdadera?

Entonces, dejémonos de tanta tontería que parecemos la RAE con tanta definición de lo mismo y vamos a acabar más confundidas que el día en el que sentimos la necesidad de salir del armario.


Este Twitter crea unas polémicas que, de verdad…Pero lo más interesante no son mis reflexiones, sino los tuits de algunas tuiteras que, como una, le han dado a la cabeza y han compartido sus pensamientos. Hay alguna que me ha encantado y quiero compartir con vosotr@s, solidarizándome, sobre todo, con aquellas que no tengáis Twitter.



@Asi_sin_mas_MJR: Mañana diré que soy hetero..."@Mimileaks: Tengo un gato, una camisa de cuadros, las uñas cortas y gafas de pasta..soy una #lesbianaverdadera"
     
@lety_27: @lesbicanarias una cosa es ser #lesbianaverdadera y otra muy diferente ser un macho sin pilín  #NoEsLoMismo

@Yelamitos: Parece ser que solo es #lesbianaverdadera la que está loca




Y hay más comentarios divertidos y reflexivos, pero no voy a quedarme aquí transcribiendo como una loca. 
La que quiera seguir leyendo que inicie sesión con su cuenta o se active una.


Pd: Para aquellas que sepan leer en inglés y utilicen twitter, pueden perderse por los hastag #LesbianProblems o #FakeLesbians, entre otros. 

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